“ES FUNDAMENTAL SUMARLE VALOR AGREGADO A LAS EXPORTACIONES”

Fue una de las principales conclusiones alcanzadas en la Mesa de Trabajo “Desarrollo Industrial Agroalimentario”. Además, se remarcó la importancia de “la regulación del Estado en los circuitos productivos para tener reglas claras” y se advirtió por las consecuencias de la concentración en la producción de alimentos.

En el cierre de la segunda semana de las Mesas de Trabajo previas al 4° Congreso Nacional del Trabajo y la Producción, funcionarios nacionales, reprentantes de PyMES, cooperativas y mutuales agrarias discutieron virtualmente por casi tres horas sobre la realidad de la industria agroalimentaria. El presidente de Industriales PyMEs Argentinos (IPA), Daniel Rosato, celebró el encuentro y destacó que “gracias a la exportación de energía, ingresarán los dólares necesarios para financiar proyectos de agroindustria”.

La Mesa de Trabajo estuvo coordinada por el director municipal del sistema de Planificación Estratégica “Berazategui 2050”, Hugo Guerrieri , y el director del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES). Nahum Mirad . Junto a ellos, participaron el subsecretario de la Unidad Ejecutora Especial de Integración Interjurisdiccional del Ministerio de Obras Públicas de la Nación, Oscar Minteguía , y el gerente de Agricultores Federados de Argentina (AFA), Darío Guerrieri . El cierre estuvo a cargo del Subsecretario de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Regional de la secretaría de Agricultura de la Nación, Luis Contigiani .

En primer término, Naum Mirad sostuvo que “ es necesario generar exportaciones con valor agregado ” y remarcó que “la industria agroalimentaria tiene un potencial enorme”. Igualmente, reconoció que “ uno de los desafíos pendientes es la provisión y distribución interna de los alimentos en el mercado interno”. Para ello, aseguró, “necesitamos cooperativizar la cadena de valor”.

“Si Argentina quiere crecer en exportación de commodities y a su vez quiere atender con justicia social a un mercado interno sin perder el incentivo de la producción, hay que cooperativizar las cadenas de valor. Esto permitirá desfinanciarizar, construir infraestructura y que la tecnología de punta sea accesible no sólo para las grandes organizaciones, sino también para las pequeñas organizaciones. Esto lo logra el cooperativismo”, explicó.

A su turno, Oscar Minteguía advirtió que “Argentina tiene un problema con el derecho a la alimentación porque está librado al mercado” y señaló que, “con la pandemia, se potenciaron las falencias generadas por concebir al alimento como una mercancía y pensar sólo en las ganancias”. “El 75 por ciento de los productos que llevamos a nuestra mesa provienen de 15 o 20 empresas, que encima son multinacionales” , graficó.

Luego de enumerar las políticas aplicadas por el ministerio de Obras Públicas, Minteguía remarcó que “hay una debilidad en los canales logísticos de la distribución de los alimentos” y llamó a “ pensar soluciones integrales no solo en la producción, sino en la distribución y en la comercialización de los alimentos” .

En otro tramo de la Mesa, intervino el presidente de Industriales PyMEs Argentinos (IPA), Daniel Rosato, quien destacó “el excelente nivel” de los disertantes y señaló que “hay una gran oportunidad porque hay una transformación muy grande en Argentina a partir de la energía” . “Sabemos que nuestro país contará con la energía necesaria para producir y, a través de la exportación de esa energía, ingresarán los dólares necesarios para financiar proyectos agroindustriales”, destacó.

Por su parte, Hugo Guerrieri destacó la importancia de fomentar la industria agroalimentaria a través de políticas públicas y comentó la iniciativa del “Polo Agroalimentario Sustentable El Pato 2050”, desarrollada por la Municipalidad de Berazategui. Según comentó, a través de este espacio “se pudo agregar valor a la producción primaria de alimentos , se promueve el arraigo y la propiedad de la tierra, y se preservan los valores hídricos y ambientales de la región”.

Durante su exposición, Darío Tarragoni recordó que “el campo ha atravesado uno de sus peores años” producto de la sequía que azotó a la Argentina y señaló que “los pequeños productores muchas veces se endeudan a gran escala para poder empezar a trabajar la tierra” de cara a las campañas agrícolas. “Para generar las nuevas líneas de trabajo necesarias, precisamos de todos: de la comunidad, de la logística, de la Economía Social y Solidaria, mejores caminos y comunicaciones” , añadió.

Finalmente, Luis Contigiani señaló que “Argentina está ante una gran oportunidad porque la agroindustria nos ofrece una posibilidad de desarrollo y de industrialización” . “Esto lo podemos hacer bajo un modelo concentrado de enclave de riqueza o bajo un modelo de integración horizontal con beneficiarios ampliados y desarrollo territorial”, explicó.

Asimismo, el funcionario propuso un modelo agroindustrial que sea “inclusivo, sostenible, eficiente, nutritivo y saludable” que “asegure la inclusión económica y social para todos los actores del sistema alimentario, especialmente los pequeños agricultores, mujeres y jóvenes”. Además, dijo que se deben “minimizar los impactos ambientales negativos, la conservación de los recursos naturales escasos y el fortalecimiento de la capacidad de recuperación frente a crisis futuras”.

En este sentido, señaló que es necesario “asegurar que se produzcan suficientes alimentos y que estén disponibles para la población mundial” y “promover el consumo de una amplia gama de alimentos saludables, nutritivos e inocuos”. “Estos ejes tienen vinculación directo con el desarrollo tecnológico y las innovaciones necesarias para que el sector productor agroindustrial pueda promover procesos y productos acordes a las demandas de los mercados” , completó.

Para Contigiani, “ quizá tengamos que dejar de hablar de ‘sustitución de importaciones’ y referirnos a un modelo bio-económico” . “Se trata de hacer una fuertísima síntesis entre ciencia, tecnología, la dimensión digital con las formas de producción”